Walmart y Amazon aspiran a ahorrar 14.000 millones de dólares lanzando una stablecoin corporativa
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Walmart y Amazon se preparan para lanzar sus propias stablecoins mientras el Senado de EE. UU. avanza con una legislación histórica que establecería un marco regulatorio federal para dólares digitales emitidos por entidades privadas por primera vez.
La legislación, conocida como la Ley GENIUS (S.394), ya ha pasado por comité y ha superado la votación de procedimiento, con una votación final en el Senado programada para el 17 de junio.
Según Bloomberg y Wall Street Journal, ambos minoristas están explorando la viabilidad de emitir stablecoins respaldadas por dólares estadounidenses o bonos del Tesoro.
Las compañías no han hecho anuncios oficiales ni han presentado solicitudes de licencia, pero equipos internos han comenzado a evaluar socios tecnológicos y rutas de cumplimiento normativo. Su principal incentivo parece ser la reducción de costos.
Las comisiones por procesamiento de tarjetas oscilan entre el 1 % y el 3 %, y se estima que Walmart y Amazon gastan alrededor de 14 mil millones de dólares anualmente (esto considerando las ventas netas, restando AWS, y aplicando una comisión promedio de 1,8 %) en dichos costos. Una reducción del 1 % se traduciría en aproximadamente mil millones de dólares adicionales en ganancias EBITDA anuales. El volumen de pagos de Amazon la posiciona para obtener beneficios similares.
Stablecoins impulsadas por la Ley GENIUS
La Ley GENIUS, patrocinada por el senador Bill Hagerty (republicano de Tennessee), busca formalizar estándares de reserva, protecciones al consumidor y reglas operativas para stablecoins de pago. Exige respaldo del 100 % en efectivo o bonos del Tesoro a corto plazo, divulgación mensual de reservas y prioridad para los tenedores de tokens en caso de quiebra.
Los emisores con operaciones superiores a los 10 mil millones de dólares estarían sujetos a supervisión tanto estatal como federal. El proyecto cuenta con apoyo bipartidista. La senadora Kirsten Gillibrand (demócrata de Nueva York) lo presenta como un mecanismo para proteger a los consumidores y al mismo tiempo permitir la innovación. La senadora Cynthia Lummis (republicana de Wyoming) ha reiterado este enfoque, destacando su importancia para preservar el papel global del dólar.
El interés de los minoristas en el ámbito de las stablecoins coincide con el creciente apoyo entre los proveedores de pago a favor de dólares tokenizados regulados. Según una encuesta reciente, el 85 % de estas empresas ahora considera que una legislación clara es una luz verde para su adopción.
Casi la mitad de los encuestados señala la “liquidación en tiempo real” como la principal ventaja frente a las infraestructuras actuales, incluso por encima del ahorro de costos. Esta convergencia entre los intereses del comercio minorista y la infraestructura financiera ha llevado a que grandes bancos estadounidenses comiencen a explorar un proyecto conjunto de stablecoin para mantener su presencia en las capas de liquidación.
La Ley GENIUS representa un cambio significativo en el enfoque de Washington tras la desaparición del proyecto Diem de Facebook (ahora Meta). Mientras que Diem enfrentó oposición por preocupaciones sobre la política monetaria y el control corporativo, GENIUS es intencionalmente más limitada.
Evita los activos algorítmicos, impone un respaldo de reservas totales y se enfoca estrictamente en la funcionalidad de pago. Estas restricciones parecen estar diseñadas para ofrecer una vía políticamente viable a la innovación del sector privado sin ceder soberanía monetaria.
El posible ingreso de Walmart y Amazon en el espacio de las stablecoins marcaría la primera vez que gigantes minoristas emiten dólares digitales bajo un marco legal federal explícito.
Su base de consumidores y escala de transacciones podrían acelerar rápidamente la adopción, haciendo común el uso de stablecoins en pagos de comercio electrónico y en cadenas de suministro.
La próxima votación del Senado el 17 de junio determinará si el marco GENIUS se convierte en ley, abriendo el camino para que los dólares digitales emitidos por minoristas pasen de la planificación interna al diseño operativo.
